FLORES COMESTIBLES
Las flores no son solo decoraciones bonitas para cupcakes o ensaladas elegantes. Como su nombre indica, las flores comestibles son aquellas aptas para el consumo humano. Aunque en muchos países su descubrimiento como ingrediente culinario es reciente, en la antigua Grecia, Egipto o Roma ya se utilizaban. Los primeros datos registrados datan del 140 a.C.
Con sabores únicos e intensos, las flores se han convertido en un ingrediente innovador y creativo en el arte culinario. Como acompañantes sutiles y coloridos o como protagonistas, ofrecen un aroma y aportan un sabor a frutas, hierbas o verduras muy original.
COMIENZO DEL USO DE FLORES COMESTIBLES EN LA GASTRONOMÍA
La primera mención registrada de flores comestibles se remonta al 140 a.C. Los romanos usaban violetas y rosas para adornar ensaladas y decorar pasteles. Mezclaban flores con mantequilla o conservas de frutas o las agregaban a adobos y aderezos para ensaladas.
La mesa romana también incluyó dientes de león salteados, vinos de violetas y un plato con un toque moderno llamado Ancas de rana con guarnición de flores de hinojo y como broche de oro un delicioso postre de natillas de rosas. Todo esto lo conocemos gracias a uno de los primeros libros de cocina del mundo, Cookery and Dinning in Imperial Rome, atribuido al gastrónomo romano Marcus Gavius Apicius.
BENEFICIOS PARA LA SALUD DE ALGUNAS FLORES COMESTIBLES
1.- Hibisco: algunos estudios indican que puede ayudar a reducir la presión arterial y los niveles de colesterol. Muchas culturas beben té de hibisco pur sus propiedades medicinales.
2.- Diente de león: suministra varios compuestos vegetales que se sabe que tienen poderosas propiedades antioxidantes. Además las flores no son la única parte que se puede comer, también se puede disfrutar de sus raíces, tallos y hojas.
3.- Lavanda: aparte de conocida por su fragancia, es aclamada por sus efectos calmantes. Su sabor combina bien tanto con ingredientes salados como dulces.
4.- Madreselva: se ha usado en la medicina tradicional china durante mucho tiempo. Las flores y sus extractos sirven para tratar diversas afecciones inflamatorias. En el mundo culinario se usa con mayor frecuencia para hacer té o jarabe aromático.
5.- Capuchina: tanto sus hojas como sus flores son comestibles y se pueden disfrutar cocidas o crudas. Su gran variedad de minerales consigue aportar efectos antioxidantes y antiinflamatorios a nuestro organismo.
6.- Borraja: en la medicina herbal se usa para tratar dolencias menores, como dolor de garganta o tos. Las flores se pueden comer frescas en ensalada o como guarnición para postres y cócteles, o se puede cocinar y agregar a sopas, salsas o rellenos de pasta rellena.
7.- Verdolaga: está lleno de vitaminas, minerales y antioxidantes, pero su mayor fama nutricional es por su contenido en grasas omega-3. De hecho, proporciona más omega-3 que casi cualquier otro vegetal de su tipo. Su flores y hojas se pueden servir crudas, salteadas o cocidas al vapor.
8.- Rosa: existen más de 150 especias de rosas y todas son comestibles. Algunas investigaciones sugieren que ciertos compuestos de las rosos puden llegar a desempeñar un papel en la reducción de la ansiedad. Sus pétalos se pueden comer crudos. También se pueden usar para crear bebidas, mermeladas o infusiones.
9.- Pensamientos: son una fuente rica de varios compuestos vegetales que tienen propiedades antioxidantes y antiinflamatorias. Por lo general tienen un sabor suave, fresco y ligeramente floral.
10.- Manzanilla: ha sido utilizada en la cocina y en la medicina tradicional durante siglos. Medicinalmente se consume para reducir la ansiedad y mejorar la calidad del sueño. Normalmente es necesario calentarla en un líquido para extraer sus compuestos bioactivos y sabores.
Aunque puedes estar acostumbrado a ver las flores solo como decoración, puedes agregar muchas de ellas a tu dieta para darle un toque de color y textura. Además, una gran cantidad de flores comestibles son muy nutritivas y contienen compuestos antiinflamatorios y potentes antioxidantes que pueden ayudar a tu salud. Pueden servirse crudas, cocinadas, fritas o espolvoreadas en tus postres.
¿Conocías este uso de las flores? ¿Las has usado en alguna de tus preparaciones culinarias? Déjanoslo en comentarios.
