Hace ya más de 100 años, los indios americanos de las zonas rurales se vieron en la necesidad de alimentar a los trabajadores durante sus largos trayectos. En ese momento, nació el inconfundible camión de comida, más conocido como food truck. Evidentemente, este concepto de comida rápida sobre ruedas ha cambiando mucho hoy en día. Veamos con más detalle sus orígenes y cómo son en la actualidad.
Comida para llevar: orígenes del food truck
La historia de la comida sobre ruedas se remonta al siglo XIX. En aquella época, los chuck wagons servían para alimentar a los vaqueros durante sus duras travesías por el desierto. Unas décadas después, las grandes ciudades empezaron a sacar beneficio de los tranvías viejos ya obsoletos. De hecho, algunos de ellos se decoraban según la estética vintage de la época.
Es indiscutible que Oscar Mayer tuvo un papel fundamental para el desarrollo de los puestos de comida para llevar en las calles. No era de extrañar ver carros en forma de salchicha en frente de las universidades, pues los estudiantes suponían una importante fuente de ingresos.
Sin embargo, el primer camión de comidas de la época moderna no surgió hasta el 2008. Raúl Martínez adaptó un viejo carrito de helados y lo convirtió en el Kogi’s Roy Choi, el cual servía deliciosos tacos por Los Ángeles.
¿Cómo llegó a España esta forma de comida rápida?
En nuestro país el concepto de restaurante móvil hizo su aparición en el 2010 como resultado de la combinación de cocina de autor y ocio callejero.
En nuestro país el concepto de restaurante móvil hizo su aparición en el 2010 como resultado de la combinación de cocina de autor y ocio callejero. Buena gastronomía, diversión y música son sus características principales. De hecho, se ha instaurado un nuevo término para designarlas: gastronetas.
Cocina de autor sobre ruedas
El concepto de food truck ha evolucionado de tal manera que muchos de los chefs más populares en la esfera gastronómica de nuestro país ya se decantan por las gastronetas para mostrar sus últimas creaciones culinarias. No es extraño que, de este modo, consigan más inversionistas para sacar adelante sus restaurantes.
Es un nicho en crecimiento y prácticamente en cualquier evento podemos acercarnos a una de ellas para degustar la sabrosa comida rápida e innovadora que nos ofrecen. ¡Porque no son solo salchichas! Podemos saborear la comida vanguardista más exquisita, por ejemplo, en un festival temático.
Por otra parte, son muy demandadas también para campañas de street marketing e incluso para amenizar un evento empresarial. Se trata de una buena manera de publicitar la imagen de marca de un negocio en particular. No podemos dejar de mencionar el Street Food Festival que se celebra cada año en Zaragoza, el Van Van Market de Barcelona o el Callejeando Food Fest. Todos ellos son ejemplos representativos de una cultura ya integrada entre nuestras costumbres.
Su normativa
Para disfrutar de todas las ventajas de este sistema, es imprescindible conocer algunos de los requisitos generales que se deben cumplir. En primer lugar, es necesario investigar las distintas localizaciones para crear una base de datos de potenciales clientes.
Un negocio itinerante se debe constituir como una empresa, pues requiere estar al día en las obligaciones tributarias y con la Seguridad Social. Además, el vehículo ha de estar correctamente homologado y certificado. Por último, son obligatorios algunos permisos, como la autorización sanitaria o un seguro de responsabilidad civil.
En definitiva, el food truck hizo su aparición para quedarse entre nosotros definitivamente.
Cabe mencionar que varios programas televisivos, como, por ejemplo, Cocineros al volante, ya se han hecho eco de las bondades de este tipo de cocina sobre ruedas. Si no se ha tenido oportunidad de degustar esta exclusiva comida para llevar, ¡es el momento de probarla!